Domingo, 8 de septiembre (19:15)
(Narra Tara)
Cuando llegué a la residencia aun estaba en una nube, me
tire buen rato buscando las llaves para entrar en mi habitación. Desde fuera se
escuchaban gritos y objetos rompiéndose, por lo que me di mas prisa (por fin
aterricé en la tierra). Cuando entré, vi a Ginny y Emily. Emily estaba saltando
en su cama y Ginny se reia mirándola con una expresión divertida. Ninguna de
las dos se percataron de mi presencia.
-¿Me voy?-dije después de carraspear un poco.
Ambas cabezas se giraron rápidamente y me dirigieron una
sonrisa.
-¡¡Bienvenida!! –me gritaron las dos tras una mirada.
Nos reimos todas sin saber exactamente por que. Despues me
preguntaron que tal mi viaje y se lo expliqué escuetamente. Cuando terminé me
picó el gusanillo y les pregunté por que estaban antes tan contentas y
excitadas.
-Nos vamos de boda, mi hermana se va a casar. Bueno faltan
tres meses pero podras conocerla y nos compraremos bonitos vestidos.
-Me alegro!! ¿Pero estas segura que podremos ir nosotras?
-Si, tranquila. Me lo ha escrito en una carta- dijo mientras
botaba en su asiento
Las chicas empezaron a hablar y explicarme todo lo que paso
mientras yo estuve en España. Al final del todo, se acordaron que debería haber
llegado un par de horas antes y me preguntaron la razón de mi retraso.
Se me escapó una risita lo que hizo que me mirasen con ojos
expectantes. Entonces se lo expliqué todo lo que pasó cuando llegué al
aeropuerto.
-Vereis, cuando llegué al aeropuerto tuve que ir a por mi
maleta. Tardaba mucho y ya pensaba que la habían perdido. Entonces oí como
alguien me dirigía la palabra desde atrás, me pareció reconocer la voz por lo
que le contesté. Me di la vuelta y estaba la persona que creía. Pero al mismo
tiempo me pareció irreal. ¿Cómo había conseguido Zayn saber que estaría en el
aeropuerto? Mi maleta la había recogido él. Me fui en su coche y pensé que me
llevaba a la residencia cuando me di cuenta de que íbamos hacia el centro de
Londres. Aparcamos cerca del río y me obligó a bajar. Llegamos al puerto, donde
una barquita nos estaba esperando. Dentro de la barca había una cesta con
comida, hemos comido y echado una siesta allí. Ya cuando terminamos hemos
venido.
(Narra Hayley)
Después de comer con Alejandro conseguí convencerle para dar
un paseo por Londres. Volvimos a la residencia bastante tarde y directamente
fuimos a comer algo en la cafetería. Cuando llegamos a la habitación Ginny no
estaba y Nicole estaba estudiando. En cuanto oyó la puerta se dio la vuelta.
-¿Qué tal la tarde? ¿Habeis solucionado todo?
-Si, tenemos un plan.-le dije entusiasmada
-Que miedito, no todos vuestros planes han acabado bien. ¿Os
acordais de…?
-Si, si me acuerdo-le corté de inmediato.
-Solo era un comentario, venga, decidme vuestro brillante
plan.-dijo en plan inocente
-No hemos dicho que sea brillante, solo que tenemos un plan-
entró en la conversación Alejandro.
-Como iba diciendo, tenemos un plan. –le expliqué lo mejor
que pude la idea.
-No está mal, pero Eleanor a lo mejor no acepta.
-Pues dile que quedais solo vostras dos, pero cuando quedéis
te llevas a este. Después de una horita, te vas con cualquier excusa.
-Está bien, mañana tengo que trabajar a las 18:30, la llamo
y quedamos en el Starbucks a las 17:30.
-¿A que esperas? Corre a por el teléfono.-le insté.
Nicole tardó menos de un minuto en llamar a Eleanor pero no
se lo cogió. Me puse nerviosa al pensar que el plan se podría ir a la mierda
pero gracias a mis amigos que mantuvieron la calma conseguimos al final
contactar con Eleanor. Después de la llamada telefónica, me acordé que ya era
muy tarde y mañana tenia que madrugar y trabajar. Ginny llegó un poco después
de ponernos el pijama, estuvimos hablando (cotilleando) un buen rato hasta que
Nicole se quedó dormida y asi uno a uno.
(Narra Nicole)
Me desperté con muchísimo sueño, le tiré a Hayley mi
almohada y a Ginny mi zapatilla, la pobre tuvo mala suerte.
-¡Venga actividad!-grité mientras me levantaba
Lo único que obtuve como respuesta es un “mmm” de Hayley.
Fui a la ventana y subí la persiana, hacia un sol resplandeciente cosa extraña
en Londres.
-No me hagáis quitaros las sabanas, chicas-les amenacé
Ambas se levantaron todo lo rápido que les permitio su
cuerpo a esas horas, mientras yo abría la puerta y me iba a ducharme. Me puse
unos shorts vaqueros y una camiseta de rayas. Hayley iba con unos shorts rosas
y una camisa vaquera y Ginny había elegido unos shorts vaqueros con una camisa
a cuadros. Cuando estuvimos todas listas bajamos a desayunar a la cafetería.
Allí nos encontramos a Tara y Emily en la cola. Tara llevaba una falda con
flores y un jersey naranja, Emily había decidido ponerse unos pantalones
granate y un jersey gris. Terminamos pronto de desayunar y nos fuimos cada una
a su habitación (para los últimos arreglos), en menos de 15 minutos nos
despedíamos de Alejandro y caminábamos hacia la universidad. Antes de irnos le
advertimos a Alejandro que intentase pasar desapercibido, ya que no habíamos
consultado si se podía quedar en la residencia (ni mucho menos en una de las
habitaciones de chicas) Las clases me resultaron igual de monótonas que siempre
y me alegré mucho cuando salimos del edificio.
(Narra Ginny)
Hoy estaba contentísima, los lunes no tengo que trabajar y
tengo toda la tarde para mi. Sea para estudiar, escuchar música, dormir la
siesta…todas esas cosas que haces en tu tiempo libre. Salí de la universidad
con una sensación de libertad inmensa. Ibamos todas andando charlando hacia la
residencia, íbamos comentando lo que íbamos a hacer o lo transcurrido en el
periodo de clase. Yo iba hablando con Nicole, sin darnos cuenta estábamos
practicamnete gritando. Todas excepto Emily tenia esa costumbre de España, pero
que se le va a hacer. En medio del camino a Tara se le cayó un libro, lo recogí
y al levantarme y dárselo vi detrás de ella una figura sonriéndome. Se me
dibujó una sonrisa en la cara y caminé medio corrí hacia él.
-¡Niall! ¿Qué haces aquí?
-Hola Ginny, pues pensé que hacia un dia genial para un
picnic y ¿Por qué no invitar a una loca amiga que tenia el dia libre?
-jajaja, de verdad¿? Pues claro que voy, espera que les
aviso al resto.
Cuando se lo conté las chicas dejaron salir unas pequeñas
risitas, “ya me lo contaras todo” me susurró Emily. Ni siquiera me digné a
contestarla caminé hacia Niall y les dije adiós con la mano. Entonces me di cuenta de la ropa que llevaba, obligué a Niall a parar y esperar en el coche hasta que me cambiase. Cuando bajé y pusimos en marcha el coche Niall me llevó a
un campo a las afueras de Londres donde la hierba estaba verde y había flores
por todos lados. Sacó del portamaletas una gran cesta llena de comida y bebida
que llevó él mientras yo cargué con el mantel y una silla. Nos sentamos bajo la
sombra de un árbol y descansando allí pasaron las horas. Me dio tiempo a hacer
todo lo que hubiese hecho en la residencia, pero con mejor copañia. Hice los
deberes con ayuda de Niall, escuché música (escuché a Niall cantar con la
guitarra) y lo mejor fue pasar el rato con el chico que más me gusta.
(Narra Emily)
Cuando llegamos a la residencia Tara y yo descansamos un
poco. Al poco tiempo empecé a hacer los deberes mientras me tomaba un té. Me
pasé literalmente toda la tarde estudiando y haciendo los deberes. La tarde se
me hizo larga e incluso cuando bajé a cenar tenía un agudo dolor en el cuello.
A pesar de todo eso, pensé con poco entusiasmo que fue productiva. Me acordé de
mi hermana y decidí llamarla cuando terminase de cenar. Abajo , en la
cafetería, me encontré a Tara. Ella había terminado de estudiar mucho antes que
yo y se había ido a apuntar a clases de danza. Empecé a reirme al imaginarme a
Tara bailando cualquier danza típica inglesa, pero ella me explicó que se
trataba de danza contemporánea. Cenamos en una mesa bastante apartada del
barullo y me explicó que mientras yo estaba encerrada en mi habitación Ginny
había vuelto y que se habían ido ella y Niall de picnic romántico. No pude
reprimir una sonrisa estúpida y encima pensé en Liam. Hacia mucho tiempo que no
le veía, no sabia nada de el ni tampoco el me había llamado. “No te preocupes”
me dije a mi misma. Me contó todo mientras cenábamos un poco de tortilla
francesa y ensalada. La gente dice que la comida en Inglaterra es horrible pero
en la residencia había comida internacional por los estudiantes de otros
países. Subimos a la habitación sin dejar de hablar y mientras nos poníamos el
pijama llamaron a la puerta. Fui a abrir pensando que seria cualquiera de mis
amigas de la 102 pero no. Era el chico de repartos que me miraba un poco
avergonzado, a ver quien me manda a mi abrir con el pijama puesto.
-Hola, busco a Emily Holmes.
-Si, esa soy yo-¿no podía ser para Tara?
-Toma, y firma quí.
El chico se fue todo lo rápido posible y yo le ayudé a irse,
para ser sinceros. Al abrir el paquete encontré una carta, un sobre blanco sin
ninguna señal y bombones. Tara me cogió un bombón sin darme cuenta y me instó a
abrir la carta o el sobre. Elegí abrir primero el sobre, encontré dos vuelos
para París. Correspondian al 18 de septiembre, dentro de poco más de una
semana. Sin entender nada no me vi en otra opción que abrir la carta, la lei
rápida y silenciosamente. Apenas me di cuenta de la respiración de Tara a mis
espaldas, seguramente leyendo cada una de las palabras que Liam me ha escrito
en esa carta. Rapidamente cogí el ordenador para contestarle, era una idea
bastante extraña pero al mismo tiempo me encantaba. Romantico y sincero. Cuando
pulsé el botón de enviar me llamó mi hermana por teléfono.
-Hola Carly! Te iba a llamar pero he tenido un imprevisto.
¡Me alegro muchísimo! ¿Ya era hora?- empecé a abordarla a preguntas y
felicitaciones
-Emily hemos tenido nosotros también un imprevisto, dime por
favor que me ayudaras.
-Claro, para eso estoy aquí.
-Verás, dentro de 3 semanas, me caso. Ya se que eran 3 meses
pero…
-¡Espera! ¿Exactamente que dia? Es que me voy a ir a Paris,
pero eso es una larga historia…
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Tara |
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Hayley |
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Ginny |
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Emily |
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Nicole |
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Ginny picnic |
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Paris |